Tokio

Si tuviera que definir Tokio en una sola palabra, sin duda diría: sorprendente. Para mí , Tokio es la ciudad donde TODO sorprende, no solo porque la ciudad es increíble, sino porque la sociedad, su cultura y sus costumbres son de lo más especiales... Es una ciudad donde lo tradicional y lo moderno se fusionan en cada esquina.

En Tokio viven más de 30 millones de personas a un ritmo frenético, y en muy poco espacio. El famoso cruce y la estación más concurridos de todo el mundo se encuentran aquí (el cruce de Shibuya, y la estación de Shinjuku). Además, es la ciudad con más neones del mundo.  Solo hace falta dar un breve paseo por el famoso barrio de Kabukicho para darse cuenta de esto.

Sin embargo, en contraposición a todo ese estrés visual y exceso de estimulación, la población japonesa adora el silencio y la calma. Tanto es así, que en el metro está prohibido hablar por el teléfono móvil, y es fácil que te llamen la atención si hablas en voz alta.

Además son verdaderos amantes del orden, les encanta hacer colas y más aún respetarlas. No es raro que, andando por la calle o en el metro, te detengas, y la persona que va detrás tuyo se quede esperando a que avances. Creo que es la sociedad más respetuosa y disciplinada que he conocido nunca.

Y así podríamos seguir hasta un sinfín de datos curiosos sobre esta ciudad: esos callejones y bares enanos, esas máquinas expendedoras repartidas por toda la ciudad y para todos los gustos, esos WC a la última en tecnología… Y todo esto, sin mencionar su gastronomía, una de las mejores de todo el mundo.

Pero, ¿y qué decir acerca de la fotografía? Con todo lo mencionado anteriormente, tal vez sobre añadir más palabras… Creo que en una ciudad con tantos ingredientes interesantes, la fotografía urbana se convierte en una verdadera adicción.